CrónicaPoética @Davpapelcronica

martes, 20 de abril de 2010

¿QUÉ ES AMOR?

Díme, padre: ¿Qué es amor?
-es el amor, hija mía,
fuente de toda alegría,
germen de todo dolor.
es pena y felicidad,
es tristeza y es contento,
es mezcla de sentimientos,
de dulzura y de maldad.
Algo que no se define,
Los nervios hace crujir
Y el corazón nos oprime.
Es torrente y es alud,
Es brisa y huracán,
Enfermedad y salud.
Es perder sosiego y calma,
De caricia ansia loca
Es poner en una boca,
Con un beso, toda el alma.
Es sentir celos rabiosos
Que causan daño cruel;
Es recibir fuego y miel
De unos labios amorosos.
Es duda y certidumbre,
Es el averno y el cielo,
Es sentir cómo va el hielo
Mezclándose con la lumbre.
Es flor de exquisito aroma
Que la existencia perfuma;
Es del pensamiento bruma,
Es del corazón carcoma.
Es potencia arrolladora,
Es debilidad de niño,
Es un inmenso cariño
Con fuerza devastadora.
Es un ansia siempre grata
De amar, querer y vivir,
Que a veces hace morir
Y que en ocasiones mata.

MANUEL CASTRO TIEDRA (español)

¿QUÉ ES AMOR?

Preguntas ¿qué es amor? –el desatino
Mayor que puede concebir la mente;
Para la gaya ciencia, astro divino;
En la patología, un componente

De la locura; enigma del destino;
Sombra, embriaguez de luz, hosca serpiente.
Amar es creer en Dios. . . Pero yo opino
Que es creer en el diablo solamente.

Qué es amor? El elíxir que extasía
Al contemplar tus ojos ese eterno
Amanecer de auroras ideales;

Es lo que tengo yo, pálida mía:
Un infierno fatal, pero un infierno
Salpicado con trozos celestiales.

AURELIO MARTÍNEZ MUTIS (colombiano)

EL CALLAR ESTE AMOR. . .

El callar este amor ha enriquecido
Tanto mi corazón en armonía,
Que en claro manantial de poesía
Su secreto dolor ha convertido.

Trocado en canción fácil el gemido,
La pena sin consuelo en alegría;
Noche por dentro y por afuera día,
Recuerda más cuanto aparenta olvido.

Mal herido de amor, pero dichoso
Con su tormento, su sonrisa ofrece
En tanto sangra por la oculta herida;

Y, fingiendo un destino venturoso,
Solo es un canto lo que dar parece
Y, sin embargo, lo que da es mi vida.

LUIS CANE (argentino)

EL AMOR

Si eres un bien arrebatado al cielo
¿Por qué las dudas, el gemido, el llanto,
la desconfianza, el torcedor quebranto,
las turbias noches de febril desvelo?

Si eres un mal en el terrestre suelo
¿Por qué los goces, la sonrisa, el canto,
las esperanzas, el glorioso encanto,
las visiones de paz y de consuelo?

Si eres nieve, ¿por qué tus vivas llamas?
Si eres llama, ¿por qué tu hielo inerte?
Si eres sombra, ¿por qué la luz derramas?

¿Por qué la sombra, si eres luz querida?
Si eres vida, ¿por qué me das la muerte?
Si eres muerte, ¿por qué me das la vida?

MANUEL GONZÁLEZ PRADA (peruano)

EL AMOR

Ah, suave afán, cabal e inútil pena,
clima de una piel tibia como un trino,
en secreto misterio la cadena
forjando está con sólo ser divino.

Astral tonicidad de sus recreos,
Preciosa soledad de sus combates,
En linterna de alarma sus deseos
Quemando está de campos a penates.

Eternidad de pétalo de rosa,
Silencio azul de álamo que aroma,
Manjar de sombra con calor de esposa,

Fruto prohibido que en el polen erra,
Tejiendo está con alas de paloma
El vestido de novia de la tierra.

MIGUEL ÁNGEL ASTURIAS (guatemalteco)

SONETO AL AMOR

Cuántas veces, amor, por retenerte
puse a tus pies mi juventud rendida.
Y cuántas a pesar de estar herida
te la volví a entregar por no perderte!

Cuántas veces también, altivo y fuerte,
por alcanzar la gracia prometida,
me batí frente a frente con la vida,
o me hallé cara a cara con la muerte!

Y hoy, cuando mi ilusión vuelve a tu lado
trayéndole al misterio de tu hechizo
la pluma azul del pájaro encantado,

torna otra vez a mi pupila el lloro
al mirar desde el puente levadizo
que está cerrado tu castillo de oro.

ALBERTO ÁNGEL MONTOYA (colombiano)

SALMO DE AMOR

¡Dios te bendiga, amor, porque eres bella!
¡Dios te bendiga, amor, porque eres mía!
¡Dios te bendiga, amor, cuando te miro!
¡Dios te bendiga, amor, cuando me miras!

¡Dios te bendiga si me guardas fe;
si no me guardas fe, Dios te bendiga!
¡Hoy que me haces vivir, bendita seas;
cuando me hagas morir, seas bendita!

Bendiga Dios tus pasos hacia el bien,
tus pasos hacia el mal, Dios los bendiga!
¡Bendiciones a ti cuando me acoges;
bendiciones a ti cuando me esquivas!

!Bendígate la luz de la mañana
que al despertarte hiere tus pupilas;
bendígate la sombra de la noche,
que en su regazo te hallará dormida!

¡Abra los ojos para bendecirte,
antes de sucumbir, el que agoniza!
¡Si al herir te bendice el asesino,
que por su bendición Dios le bendiga!

¡Bendígate el humilde a quien socorras!
¡Bendígante, al nombrarte, tus amigas!
¡Bendígante los siervos de tu casa!
¡Los complacidos deudos te bendigan!

¡Te dé la tierra bendición en flores,
y el tiempo en copia de apacibles días,
y el mar se aquiete para bendecirte,
y el dolor se eche atrás y te bendiga!

¡Vuelva a tocar con el nevado lirio
Gabriel tu frente, y la declare ungida!
¡Dé el cielo a tu piedad don de milagro
y sanen los enfermos a tu vista!

¡Oh querida mujer!… ¡Hoy que me adoras,
todo de bendiciones es el día!
¡Yo te bendigo, y quiero que conmigo
Dios y el cielo y la tierra te bendigan!

EDUARDO MARQUINA (español)

CIENCIA DE AMOR

No sé. Sólo me llega, en el venero
de tus ojos, la lóbrega noticia
de dios; sólo en tus labios, la caricia
de un mundo en mies, de un celestial granero.

¿Eres limpio cristal, o ventisquero
destructor? No, no sé… De esta delicia,
yo sólo sé su cósmica avaricia,
el sideral latir con que te quiero.

yo no sé si eres muerte o eres vida,
si toco rosa en ti, si toco estrella,
si llamo a Dios o a ti cuando te llamo.

Junco en el agua o sorda piedra herida,
sólo sé que la tarde es ancha y bella,
sólo sé que soy hombre y que te amo.

DAMASO ALONSO (español)

CASO

A un cruzado caballero,
garrido y noble garzón,
en el palenque guerrero
le clavaron un acero
tan cerca del corazón,
que el físico al contemplarle,
tras verle y examinarle,
dijo: “Quedará sin vida
si se pretende sacarle
el venablo de la herida”.

Por el dolor congojado,
triste, débil, desangrado,
después que tanto sufrió,
con el acero clavado
el caballero murió.
Pues el físico decía
que, en dicho caso, quien
una herida tal tenía,
con el venablo moría,
sin el venablo también.

¿No comprendes, Asunción,
la historia que te he contado,
la del garrido garzón
con el acero clavado
muy cerca del corazón?
Pues el caso es verdadero;
yo soy el herido, ingrata,
y tu amor es el acero:
¡si me lo quitas, me muero;
si me lo dejas, me mata!

RUBÉN DARÍO (nicaragüense)

No Te Amo

No te amo como si fueras rosa de sal, topacio
o flecha de claveles que propagan en fuego:
te amo como se aman ciertas cosas oscuras,
secretamente, entre la sombra y el alma.

Te amo como la planta que no florece y lleva
dentro de sí, escondida, la luz de aquellas flores,
y gracias a tu amor vive oscuro en mi cuerpo
el apretado aroma que ascendió de la tierra.

Te amo sin saber cómo, ni cuándo, ni de dónde,
te amo directamente sin problemas ni orgullo:
así te amo porque no sé amar de otra manera,

Sino así de este modo en que no soy ni eres,
tan cerca que tu mano sobre mi pecho es mía,
tan cerca que se cierran tus ojos con mi sueño.

Pablo Neruda (chile)

lunes, 19 de abril de 2010

GOZOS DEL DOLOR DE AMOR

Divina desgarradura
del alma. Lento morir
de dolor.
Bendita tu quemadura
que me ha enseñado a sufrir
por amor.

Pensé un día que el amar
fuera liviano placer
sin espinas;
pero he visto, a mi pesar,
que es un puro padecer
penas divinas.

Mas bendigo mi dolor
y bendigo la amargura
que me acosa,
y este callado terror,
y esta sed, y esta ternura
dolorosa.

Si yo supiera cantar,
con qué celestial lamento
cantaría.
Cantar fuera mi llorar,
¡con que melodioso acento
lloraría!

Cuando los hombres sufridos
padecen tribulaciones,
llanto y mengua,
son más dulces sus gemidos,
son más suaves las canciones
de su lengua.

Pero cantar olvidé
y están ya secas las fuentes
de mi llanto ...

¿Que se hizo, adónde fué,
de aquellas horas ausentes,
el encanto?

La luz de mis alegrías,
el rayo de mi esperanza,
¿dónde fueron?
De aquellos pasados días,
el ardor y la pujanza
¿qué se hicieron?

Yo he perdido corazón,
juicio, voluntad, placer
y sosiego;
me consume la pasión
y sólo sé amar y arder
en este fuego.

Supe mirar y cegué,
supe hablar y enmudecí
en hondo abismo;
yo, que tan claro me vi,
desde que amo no sé
de mí mismo.

¡Fuerte amor, santa piedad
que me avivas y me inflamas
con tu ardor!
¡Oh congoja! ¡Oh caridad!
¡Oh pena y deleite! ¡Oh llamas
del amor!

Se hundió en mi carne el cauterio:
salió el alma por la herida;
quedé inerte;
sentí el terror del misterio ....
¡del misterio de la vida
y de la muerte!

Pero en el trágico instante,
¡oh fuentecilla que bañas
mi cercado!,
miré en tu espejo el semblante
que yo tengo en las entrañas
dibujado.

Sobre el cristal de la fuente
rutilaban como estrellas
sus pupilas ...
¡con un mirar tan clemente!,
¡con unas luces tan bellas
y tranquilas!

¡Amor! de tu flecha herido,
yo olvidé mis pesadumbres,
mis enojos,
y vi el cielo prometido
viendo las serenas lumbres
de tus ojos.

¿Qué importa vivir penando
y sentir en noche oscura
poco sueño,
si el alma vela, gozando
de la altísima hermosura
de su dueño?

Si el espíritu se enciende,
¿dónde habrá para esta tea
noche obscura?
Locura de amor me prende.
¡Dulce amor! ¡Bendita sea
tu locura!

Tú me enseñaste a sufrir,
tú me enseñaste a gozar
padeciendo.
Tú me enseñaste a vivir,
tú me enseñaste a triunfar
resistiendo.

Yo darte el alma he querido,
para que en ella ejercites
tu rigor.
¡Con tus dardos la has herido;
tenla, pero no le quites
su dolor!
RICARDO LEÓN (español)

SONETO DEL DIVINO AMOR

Amor es este que por ti me abrasa;
amor es este que hacia ti me impele;
amor es este que de amor se duele
en amado dolor que nunca pasa.

Amor es este que se da sin tasa
como nunca en la vida darse suele;
amor que estoy temiendo que se vuele
porque sin él, la muerte fuera escasa.

Amor, y extraño amor este amor mío,
silencioso y profundo como un río
profundo, silencioso y caudaloso.

Amor que nada pide y nada espera
amor que es como un lago sin ribera
bajo un cielo piadoso.

ALFREDO R. BUFANO ( Argentina )

LEYENDO A DANTE

“Amor, Ch’a nullo amato amar perdona”
Dante – L’Infierno – canto V .

“Que amor obliga a amar al que es amado
-dijo, alzando del libro la cabeza
Con gesto doloroso de extrañeza-;
¡Muy de otro modo el mundo está enredado!”

“¡Y decírmelo a mí, que he devorado
De este amor, que él ignora, la tristeza;
Que de dolor me muero, y por fiereza
Mantengo el corazón amordazado!”

“¡Que infierno el tuyo, oh Dante, en que pusiste
Dos amantes en dulce abrazo opresos
Y en ósculos sus bocas confundiste!”

“¡Ay! El infierno de mi amor no es de esos;
Oye, aprende lo que es un alma triste:
¡conmigo enterrarán todos mis besos!”

EFE GÓMEZ (colombiano)

AMO AMOR

Anda libre en el surco, bate el ala en el viento,
late vivo en el sol y se prende al pinar.
No te vale olvidarlo como al mal pensamiento:
¡le tendrás que escuchar!

Habla lengua de bronce y habla lengua de ave,
ruegos tímidos, imperativos de mar.
No te vale ponerle gesto audaz, ceño grave:
¡lo tendrás que hospedar!

Gasta trazas de dueño; no le ablandan excusas.
Rasga vasos de flor, hiende el hondo glaciar.
No te vale decirle que albergarlo rehúsas:
¡lo tendrás que hospedar!

Tiene argucias sutiles en la réplica fina,
argumentos de sabio, pero en voz de mujer.
Ciencia humana te salva, menos ciencia divina:
¡le tendrás que creer!

Te echa venda de lino; tú la venda toleras.
Te ofrece el brazo cálido, no le sabes huir.
Echa a andar, tú le sigues hechizada aunque vieras
¡que eso para en morir!

GABRIELA MISTRAL (chilena)

VERSOS DE ALABANZA

VERSOS DE ALABANZA

Alabado sea, alabado,
el que de amor lleva inflamado
el corazón como una tea
(el corazón alegre y triste
de amar a todo cuanto existe).
Alabado. Alabado sea.

Alabada el alma agradecida
en que se mantiene encendida
la lumbre santa de la idea.
alabada y enaltecida.
otorgado al final le sea
el lauro nunca mercescente
con la frente del creyente
corona palas atenea.

Alabado el que cada día
recomienza con alegría
lo que le toca en la tarea.
surge la tierra, el mar o el cielo,
maneje yunque o escalpelo,
alabado. alabado sea.

Pero por sobre todo aquello
que ilumina con un destello
nuestra existencia triste y fea;
más que todo lo puro y lo suave,
más que la rosa, más que el ave
(ave misma que gorjea,
rosa ella misma que embalsama),
alabado el alma que ama.

ENRIQUE MÉNDEZ CALZADA (argentino)

AMOR ANTIGUO

Amor antiguo, cuya sombra empaña
mi cariñosa propensión de ahora,
eres como una sombra de montaña
sobre el encendimiento de la aurora.

Amor antiguo, cuya pesadumbre
traba la agilidad de mi alegría,
eres la tiranía de la cumbre
contra la libertad del mediodía.

Amor antiguo, cuya voz sofoca
la nueva vocecita del cariño,
eres palabra de proyecta boca
en una boca inédita de niño.

Amor antiguo, cuyo sentimiento
hace caber el mundo en nuestro llanto,
eres el alma convertida en viento
y eres el viento convertido en canto.

Amor antiguo, cuya remembranza
cada amorosa perspectiva cierra,
eres esa emoción que sólo alcanza
quien se acuerda del mar desde la tierra.

FRANCISCO LUIS BERNÁRDEZ (argentino)

EL QUERER

En tu boca roja y fresca
beso, y mi sed no se apaga,
que en cada beso quisiera
beber entera tu alma.

Me he enamorado de ti
y es enfermedad tan mala,
que ni la muerte la cura,
¡bien lo saben los que aman!

Loco me pongo si escucho
el ruido de tu falda,
y el contacto de tu mano
me da la vida y me mata.

Yo quisiera ser el aire
que toda entera te abraza,
yo quisiera ser la sangre
que corre por tus entrañas.

Son las líneas de tu cuerpo
el modelo de mis ansias,
el camino de mis besos
y el imán de mis miradas.

Siento al ceñir tu cintura
una duda que me mata
que quisiera en un abrazo
todo tu cuerpo y tu alma.

Estoy enfermo de ti,
de curar no hay esperanza,
que en la sed de este amor loco
tu eres mi sed y mi agua.

Maldita sea la hora
en que contemplé tu cara,
en que vi tus ojos negros
y besé tus labios grana.

Maldita sea la sed
y maldita sea el agua,
maldito sea el veneno
que envenena y que no mata.

MANUEL MACHADO (español)

LA ROSA DEL AMOR

Amor es brote en áspera corteza;
Y en la mudez del agua transparente
Es el canto que nace en la corriente,
Que luego de extasiada se apereza.

Es la rosa que mira y se adereza
Y penetra al espejo de la fuente;
Y no hay en todo el cielo del oriente
Una estrella que luzca su belleza.

Es astro en tierra; y es mudez en canto;
Es ingrávido cuerpo, peso y vuelo;
Es dolor de gozar, y goce en llanto;

Es huir lo real por el anhelo;
Y en tal locura y en trastorno tanto
Se confunden la tierra con el cielo.

PEDRO PRADO (chileno)

Amor

Amor que vida pones en mi muerte
como una milagrosa primavera:
ido ya te creí, porque en la espera,
amor, desesperaba de tenerte.

era el sueño tan largo y tan inerte,
que si con vigor tanto no sintiera
tu renacer, dudara, y te creyera,
amor, sólo un engaño de la suerte.

Mas te conozco bien, y tan sabido
mi corazón, te tiene, que, dolido,
sonríe y quiere huirte y no halla modo.

Amor que tornas, entra. Te aguardaba.
Temía tu regreso, y lo deseaba.
Toma, no pidas, porque tuyo es todo.

MANUEL MAGALLANES MOURE (chileno)

domingo, 18 de abril de 2010

Ni tú me debes ni te debo nada...

Ni tú me debes ni te debo nada.
Un río fuimos. Un espejo franco.
Los dos bebimos de las aguas claras;
asomamos los dos al vidrio manso.
El mismo beso nos quemó en los labios,
con el mismo carbón prendido en llama.
Las mismas ilusiones se nos fueron
cuando cantar no quiso más el alma.
Fuimos río y espejo, fuimos besos,
y cantamos con hojas y con alas
canciones de alegría en los espejos.
Hoy tenemos a mano cuentas claras
que urdieron en silencio nuestros dedos.
Ni tú me debes ni te debo nada.

GUILLERMO GÓMEZ BRENES ( Nicaragua, 1930 )
ODA AL AMOR

Una tarde que ya nunca olvidarás
llega a tu casa y se sienta a la mesa.
Poco a poco tendrá un lugar en cada habitación,
en las paredes y los muebles estarán sus huellas,
destenderá tu cama y ahuecará la almohada.
Los libros de la biblioteca, precioso tejido de años,
se acomodarán a su gusto y semejanza,
cambiarán de lugar las fotos
Otros ojos mirarán tus costumbres,
tu ir y venir entre paredes y abrazos
y serán distintos los ruidos cotidianos y los olores.
Cualquier tarde que ya nunca olvidarás
el que desbarató tu casa y habitó tus cosas
saldrá por la puerta sin decir adiós.
Deberás comenzar a hacer de nuevo la casa,
reacomodar los muebles, limpiar las paredes,
cambiar las cerraduras, romper los retratos,
barrerlo todo y seguir viviendo.

MARÍA MERCEDES CARRANZA (Colombiana)