Y si te quiero abierto
como el centro imposible
de un mundo transparente,
si te quiero imposible,
más allá de mis brazos
o la aurora que extiende
un sueño en las tinieblas,
más abierto que el viento,
más leve y más amante,
será porque mañana
nos quisiera infinitos,
unidos como nieve
a punto de ser agua.
Y es por eso que dejo
resonar la memoria,
todas esas palabras
de hilo que se enredan
en tu boca o la mía.
Chantal Maillard